Para Guerrero Strachan, intervenir sobre la ciudad heredada de principios del siglo XX fue una oportunidad para modernizarla, recualificar el espacio urbano y otorgarle carácter, incorporando a los logros arquitectónicos que se consiguieron a finales del XIX las innovaciones formales propias de su trabajo. Los hallazgos compositivos y volumétricos de sus edificios urbanos están inseparablemente unidos a la caracterización estilística de su arquitectura, en una búsqueda interesada más en modernizar la ciudad que en encontrar la novedad, con la que definió una impronta para la ciudad de Málaga.
2. SUBURBANOS PARA MIRAR EL MAR
Con la creación del Parque de Málaga al iniciarse el siglo XX, surgía una nueva manera de vivir en relación con la contemplación de la naturaleza y con el disfrute del clima, lo que propició que la ciudad se expandiese a lo largo del antiguo Camino de Vélez adaptándose a su singular topografía al borde del mar.
Fernando Guerrero Strachan, con su obra suburbana, encontró soluciones ejemplares para dar forma en este contexto a un nuevo paisaje construido como mirador sobre el Mediterráneo.